Juan (Ivan) Alonso de Huidobro (tío-bise abuelo de Francisco García Huidobro)


Juan (Ivan) Alonso de Huidobro era hijo de García (nombre) Alonso de Huidobro y de Ana de Pereda. Este Juan Alonso de Huidobro se casó con Francisca Fernandez de Mata. Lo que nos interesa a nosotros es una hermana de este Juan Alonso de Huidobro, Catalina Alonso de Huidobro. Esta Catalina Alonso de Huidobro se casó con Juan de Huidobro, como aparece en el testamento del padre del primer marqués de Casa Real, ambos eran hijodalgo de Quecedo. Uno de los hijos de este matrimonio fue José (Josef) de Huidobro (1632) quien a su vez casó con Josefa Alonso de Huidobro. Estos fueron los padres de Francisca Huidobro Alonso de Huidobro, madre del marqués de Casa Real. Entonces, el mencionado Juan (Ivan) Alonso de Huidobro era tío abuelo de la madre del marqués y tío-biseabuelo de Francisco García Huidobro. ¿Por qué esto es significativo? Porque contamos con un valioso documento que escribió el mismo Juan Alonso de Huidobro, su árbol genealógico que se remonta hasta seis generaciones más atrás. Este árbol genealógico será citado por Francisco García Huidobro cuando obtenga la orden de Santiago para fundamentar su hidalguía.

¿Qué cosas sabemos de este Juan Alonso de Huidobro? En el documento aduce que es vecino de la ciudad de Burgos y del lugar de población del dicho valle (Valdivielso). Luego va escribiendo varios consejos que traducen una manera de pensar propia de la época. En varias partes aduce a su condición noble. Ninguna cosa es más provechosa y necesaria a los hombres que saber quienes son, para que ni la soberbia los entone, ni la vileza de ánimo los acorte,  siempre que los caballeros nobles tuvieran en cuenta y memoria de su linaje y de quienes han sido sus pasados vergüenza les causará no ser tales. La honra para Juan Alonso de Huidobro no sólo es algo propio del linaje, sino que también del actuar. Hay una conciencia de superioridad no sólo de clase, sino moral. La cual honra se alcanza con la virtud y buenas obras, y esta es la diferencia  que hay de unos linajes y otros, el haber sido para más y más virtuosos, y demás valor los unos que los otros, lo cual los hizo claros e ilustres a los unos, y a los otros al contrario, por su poquedad de ánimo y ruines obras depravadas costumbres se quedaron bajos y abatidos. Esta conciencia de nobleza y superioridad moral es un imperativo que Juan Alonso de Huidobro siente se transmite de generación en generación. Y así considerando esto, el que es noble y principal, ha de tratar por aventajarse más, o por lo menos con perdurar lo que sus antepasados merecieron y ganaron. 


Otro aspecto que Juan Alonso de Huidobro menciona con insistencia en su escrito es la necesidad del noble de escoger adecuadamente a su compañera y madre de sus hijos y descendientes. Ha de procurar que sea noble, y principal, virtuosa y de buenas costumbres para conservar la nobleza y limpieza de su casa.  Respecto a la riqueza apunta a la sobriedad. Hay una idea que los bienes son limitados y hay que cuidarlos para las generaciones futuras. Señala que la riqueza no debe conducir al camino de la abundancia porque por gusto de un pequeño placer como es el regalo de una vida, también deje en mengua y abatamiento todo un linaje...y el que a cambio de muchos criados deja a sus hijos, criados y sujetos a que nadie los codicie ni estime. Y el que por vestir sedas y galas quiere que sus hijos no se puedan vestir de ninguna dignidad ni honra de las que sus antepasados tenían. Por último enfatiza de nuevo en que lo que caracteriza a un noble son las virtudes. Y entiendan todos los que son nobles que siéndolo, y virtuosos con criados o sin ellos, pobres y ricos, serán estimados y respetados y a donde quiera bienvenidos, pues las riquezas no son las que hacen al hombre bien visto, sino las virtudes. Termina advirtiendo en tono solemne la importancia de sus reflexiones: Pido y suplico con gran encarecimiento a mis deudos y a mis hijos y nietos mando so pena de mi maldición que tengan en cuenta de considerar lo que he dicho y guardar y conservar la nobleza y la limpieza de sus antecesores, así en sus obras como en la sangre con la quien la suya ajuntaren escogiendo mujer noble y limpia para Madre de sus hijos. 

De este Juan (Ivan) Alonso de Huidobro escribe Luis Vallona, escribe que sucedió en el mayorazgo de Quecedo y compró la casa y torre y cercado del lugar de Población y en la Iglesia parroquial la capilla de la advocación de Nuestra Señora para sus entierros y otros en el convento de San Francisco de Burgos y unas casas principales al huerto del Rey y cuatrocientas fanegas de pan de renta en la tierra de aquella comarca. Se casó tres veces, la primera con Doña Mariana Lopez de Mendoza, natural de la provincia de Alaba no tuvo hijos. La segunda con Doña Francisca Fernández de Matta y la tercera no lo capto. 

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